La Escuela de atenas

La Escuela de atenas
Escuela de Atenas por Rafael

domingo, 10 de noviembre de 2013

Búsquedas en vano


Uno de los conceptos mas interesantes sobre el que habla Platón, es lo que conocemos como el amor platónico. Esa referencia a un amor inalcanzable que mucho se usa en la cultura occidental. Si nos remontamos al mito original, este consistía en un ser perfecto, un circulo, que en tiempos de Platón representaba la perfección. Esta criatura, al hacer enojar a los dioses, fue condenado a perder su perfección por lo que es partido en dos. Un hombre y una mujer, hechos el uno para el otro, resultan de esta división y estos dos estarán siempre en la búsqueda del otro  pero será en vano porque nunca se encontrarán.  
Este mito representa la búsqueda que tiene el humano por conceptos idealizados, por la perfección, por algo inexistente y que lo único que le proveerá es una insatisfacción constante. Pero esto no se limita únicamente en cuanto al amor platónico, sino que se traduce a muchos otros campos en los que el hombre siempre desea algo mas, algo mejor, algo que va a completar ese vacío que siente. Será que está en la naturaleza del hombre siempre buscar algo ideal que complete el vacío que siente? 
Puede ser que por eso es muy fácil que caigamos en conductas como el consumismo, en el cual ese vacío esperamos que se llene por un objeto, pero la satisfacción que nos da ese objeto es efímera porque en realidad queremos el producto que esta por encima de este y al obtener este otro producto solo se refuerza un circulo vicioso.  
Son estas búsquedas que nosotros mismos nos generamos, las que muchas vece impiden la felicidad. Porque la felicidad al también idealizarse  se convierte en otra mas de estas búsquedas inalcanzables. Parece ser que la única solución a esta problemática es simplemente romper con la idea de que existe algo perfecto en todo, dejar de buscar a nuestro amor platónico y  disfrutar del momento presente.

Esteban Ortega

1 comentario:

  1. El deseo inagotable. Buena reflexión Esteban y sin duda un excelente final. Quizá sea eso: aceptarnos como seres incompletos. Tienes 10.

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