En el año de 1948, el periodista y escritor inglés
George Orwell tuvo una visión en la que se imaginaba en lo que se convertiría
el mundo en un futuro que era medianamente
distante para ese entonces. Esta visión futurista, de un régimen totalitario
como nunca había existido en la historia de las civilizaciones, es narrada en
“1984”recuerda cómo se hace referencia a un libro, la cual se convirtió en una de las novelas más representativas y
controversiales de la época, publicada en 1949.
La razón por la que escogí este libro fue para
analizar la diferencia entre un régimen futurístico ficticio y un régimen
actual real. Hacer el análisis del propósito que se plantea cada régimen
autoritario y también analizar las estrategias que pude utilizar para alcanzar
estos propósitos. Además de la connotación política de la novela, también me
llamó la atención la connotación filosófica, pues Orwell encuentra una manera
muy interesante de representar la manera en la que el hombre puede contradecirse
a si mismo, entrando en un ciclo vicioso de pensamientos sin sentido que
empiezan a formar una verdad creada.
La novela está situada en mundo completamente desintegrado
al que conocemos. Dividido en tres superestados que se van formando de la siguiente
manera: Europa es absorbida por Rusia (llamado Eurasia), el Imperio Británico
por los Estados Unidos (Oceanía), y Asia Oriental (Eastasia). Londres es la
ciudad en la que ocurre la trama; un Londres completamente destruido por una
Guerra civil que tuvo como objetivo, como cualquier revolución socialista,
destruir a las clases sociales más altas para llegar a un estado utópico de
igualdad y calidad de vida para todos, que resulta, contrariamente, en una
dictadura absoulta llevada por un partido politico entero, en vez de un solo
individuo pero teniendo la figura de éste. Una dictadura que mantiene a la
población es un estado miserable de precariedad en el nombre del socialismo.
Si ponemos bajo una lupa la visión de Orwell, podemos
analizar las razones por la que pudo pensar que las sociedades del futuro se
convertirían en regímenes totalitarios en los que la individualidad no existía.
Regímenes basados enteramente en odio, miedo y la deshumanización de la
sociedad. No me parece sorprendente que el autor se haya imaginado un mundo en
el qué no solo la globalización, sino que la libertad, habían sido
completamente erradicadas por el Estado (sin la consciencia de sus ciudadanos);
países en guerra constante, personas bajo vigilancia permanente, comunicaciones
y oposición eliminada y propaganda convincente. ¿No fue así como los regímenes
totalitarios de la época habían llegado al poder? Hitler, Mussolini, Franco e incluso Stalin habían
alcanzado el control total de su población a través del miedo y las ideologías
políticas extremas.
Después de tantas guerras para destruir dictaduras,
no hubiera sido sorprendente que una de ellas hubiera sido exitosa encontrando
la fórmula del dominio político, económico y social absoluto; una manera de
mantener el control sin ser interrumpido por las democracias emergentes, una
manera de mantener a la población cegada, sedada, ignorante, esclavizada y aún
así satisfecha. Este es el mundo que Orwell imaginó.
“LA GUERRA ES LA
PAZ
LA LIBERTAD ES LA ESCLAVITUD
LA LIBERTAD ES LA ESCLAVITUD
LA IGNORANCIA ES LA
FUERZA”
Estas tres frases son el lema de un partido político,
que parecería ser meramente literario, en el libro de George Orwell “1984”
publicado en 1949. Sin embargo, tiene una connotación poderosa por ser
completamente verídico tanto en los
principios del INGSOC, como de cualquier régimen que buscara el control
de sus ciudadanos.
Después de una
guerra con connotación socialista, no es sorpresa el resultado (no intento
decir que una revolución con una meta democrática hubiera sido más exitosa). Como
cualquier revolución de este estilo (teniendo como principal ejemplo la
revolución Rusa), el final de la guerra no acabó con la represión, ni abrió paso a la reconciliación, ni tampoco
supuso el fin de la división de clases; pues enfatiza que desde el principio de
las civilizaciones han existido tres grupos de personas: Los altos, los medios,
y los bajos. Tres clases sociales que se mueven en armonía y aunque traten de
destruirse no existirían una sin la otra, pues al intentar una clase destruir a
su “superior” a través de una guerra, esta toma la posición de la vencida y el
ciclo recomienza.
Los diferentes países, después de sus respectivas
revolucioes, están en guerra permanente. Sin embargo, la Guerra deja de ser la
lucha desesperada por la superviviencia y los ideales politicos y sociales que
era a principios del seglo XX, sino que se convierte en una lucha interminable
de Estados incapaces de destruirse unos a otros, pero dispuestos a mantener un
estado de emergencia activo y constante para mantener a su población siempre
alerta, siempre hambrienta, y por siempre dañada e incapaz de despertar.
Estrategias políticas de guerra, cultura, fe, religión,
incluso manteniendo a la mente controlada, nos pueden parecer ridículas en la
sociedad supuestamente “modernista”¿moderna o modernista? en la que vivimos hoy en día. Sin embargo,
al leer el libro no parece disparatado el pensar que muchas ideas se relacionan
de forma casi alarmante con muchos regímenes hoy en día: Hiporesía política,
fanatismo, ortodoxia. Cuentan con las mismas características, rigiendo desde un
sistema disfuncional siempre clasista y siempre privilegiado. Aunque aún hay
muchos puntos que analizar , comienza a abrirse la interrogante de sí la novela
de Orwell fue siempre pensada como una novela futurística, o una casi profética.
Bibliografía
Orwell, G. (1957) 1984. Barcelona: Ediciones destino
Bibliografía
Orwell, G. (1957) 1984. Barcelona: Ediciones destino
Qué interesante ensayo Josefa, veo una gran conexión entre párrafos y un equilibrio exacto entre el contenido del libro y lo que tú pensaste sobre él. Recomiendo que mantengas esta línea, hagas un cierre y sigas colocando tus propias reflexiones. ¿Qué piensas de un gobierno como el que se plantea en el libro? ¿qué piensas del gobierno mexicano, estadounidense, latinoamericano?
ResponderEliminarBien, muy bien.