¡Entonces qué?

Diego Servitje

6°A CCH

Filosofía

¡Entonces qué?

¿Habría sido tan difícil el ponerse de acuerdo sobre el origen de todo, como lo es hoy en día? Vaya, si hoy en día no es posible estar de acuerdo ni siquiera en él como un equipo de futbol debe jugar, pues todos tenemos una visión distinta de lo que vemos y más aun de lo que queremos. ¿Cómo le habrían hecho hace miles de años  todos los reconocidos filósofos de la época para postular diferentes puntos de vista y pasar a la historia? A mi entender en esa época todo era válido pues aún no estaba definido lo bueno y lo malo, pero lo más importante era que no se conocía suficiente. 

    Un ejemplo muy claro es Tales de Mileto con su creencia de que todo surgía del agua, hoy en día sería impensable creer algo así ya que tenemos herramientas que nos hacen refutar tales ideas como lo puede ser la ciencia. Sería más aceptable la idea de Anaximandro que nos dice que lo que nos creo fue algo indefinido y no un elemento, mas tarde sería Pitágoras quien nos introduciría al mundo de los números, al igual que a una vida muy complicada pues con el todo toma un valor cuántico y numérico. Después aparece en escena Empédocles hablándonos del hombre y sus 4 elementos como creadores absolutos de todo. Qué decir de Sócrates, uno de los más conocidos, el nos introduce a un mundo aún más superficial en donde la  verdad es absoluta y se deriva del conocimiento, Sócrates no nos deja obras sino un hombre llamado Platón, su discípulo. Este hombre de espaldas anchas tomas las ideas de Heráclito y Parménides, quienes dicen que “lo que es, no es” y “lo que es, es” respectivamente, Platón nos habla de la existencia de dos mundos  relativamente distintos, Topos Uranus, perfecto, eterno, inmóvil y donde existen las ideas, por otra parte está el que nosotros conocemos, el físico y donde hay múltiples cosas. 

    Aristóteles, el maestro, un hombre dedicado a su vida y a sus pasiones pero estudioso de sus problemas, con el todo se vuelve más sencillo pues nos introduce un mundo más real en donde el único origen es el pensamiento, el alma toma un papel importante como base de la felicidad, pero es aun más importante un motor inmóvil que nos mueve a todos.

    Vaya mezcla de ideas que tuvimos hace miles de años, ¿Pero quién está bien? He llegado a la conclusión de que el ponerse de acuerdo nunca fue fácil porque nunca lo hicieron, y nunca lo haremos ya que necesitamos de esas largas discusiones sobre cosas insignificantes y de esas tontas conversaciones para sobrevivir no solo como seres humanos sino como personas pues son parte de nuestras vidas actitudes y costumbres. Todo es válido y todo será siempre y cuando seamos nosotros mismos.