La
religión ha estado presente a través de la historia del hombre , actuando en
forma de una estricta guía espiritual que pretende enseñarle al hombre la mejor
manera de comportarse para poder construir un mejor mundo. La religión se justifica a sí misma en la idea
de que hay un ser superior (Dios), que creó al universo y todo lo que contiene
y le indica a los humanos cómo deben de actuar principalmente a través de un
libro. Esto no justifica en lo absoluto ya que en primer lugar debes asumir sin
evidencia alguna que existe un Dios. Si de por sí es complicado comprobar la
existencia de algo, es aún peor asumir que existe un Dios cuando las probabilidades
de que exista están fuertemente en contra. Posteriormente debes convencerte a
ti mismo de que quienes escribieron libros sagrados como la biblia en realidad
están cumpliendo con la voluntad de dicho Dios. Entiendo que la religión es un
asunto de fe, lo cual me molesta en varios sentidos. En primer lugar, la fe se
puede definir como una creencia que no está sustentada en pruebas. Por lo
tanto, el primer paso para creer en una religión es ignorar la realidad y creer
las cosas sólo porque una autoridad te lo dice. Puede que esto no parezca muy
importante, pero el pensamiento irracional que promueven las religiones puede
llegar a ser muy desastroso para la humanidad, tal como los actos terroristas
que desafortunadamente sufrimos en la actualidad, pero también hay quienes
argumentan que este pensamiento irracional obliga a la gente a actuar bien en
cualquier situación. Es decir, la fe puede ser beneficiosa o desastrosa para la
humanidad, pero no hay por qué arriesgarnos cuando la verdadera solución es que
la gente aprenda a solucionar conflictos y elaborar conclusiones basados en
evidencias del mundo real. Esta forma de pensar es lo que ha hecho prosperar a
la humanidad, pero desafortunadamente no es así para gran parte de la población
mundial. Entonces, en resumen, como la
improbable existencia de Dios no puede ser empíricamente comprobada, las
autoridades religiosas no deberían mezclar las verdades absolutas con elementos
casi ficticios. A continuación se analizarán algunos argumentos populares que
se utilizan para verificar la existencia de Dios, para comprobar que no tienen
sentido alguno si son analizadas racionalmente.
En
el siglo XIII Tomás de Aquino estableció pruebas de la existencia de Dios, que
básicamente dicen:
1. 1. Nada se mueve sin la acción de otro objeto en movimiento. Esto lleva a un regrese infinito,
del cual el único escape es Dios. Algo tuvo que haber causado el primer
movimiento, y ese algo lo llamamos Dios.
2. 2. Nada se causa
por sí mismo. Todo tiene una causa anterior, y otra vez se genera un regreso
que sólo puede ser terminado por una causa primera, que llamamos Dios.
3. 3. Debió haber un
tiempo en el que no existían las cosas físicas.
Pero como las cosas físicas existen ahora, seguro hubo un elemento no
físico que las hizo existir, conocido como Dios.
Evidentemente
estos tres argumentos se basan en la idea de que un retroceso infinito sólo
puede ser detenido por Dios, pero se asume sin razón alguna que Dios es
inmune a dicho retroceso. Lo que en
verdad está sucediendo es que se está utilizando a Dios de forma completamente
arbitraria para terminar el retroceso infinito, simplemente por que creemos que
necesita haber algo que lo termine en primer lugar. Aunque estas evidencias
pudieran considerarse como válidas, de cualquier forma no explican las
características que las religiones le atribuyen a Dios. En cualquier caso, si se tiene la necesidad
de poner fin a la regresión infinita, resulta mucho más lógico proponer un
concepto físico como la teoría del Big Bang, que está basado en evidencias reales
y por lo tanto permite un mejor entendimiento del universo. Intentar justificar
la existencia de Dios como la explicación a fenómenos que no entendemos sólo
sirve para alejarnos más de la verdadera respuesta y matar nuestra curiosidad
de comprender el universo.
Otro
argumento establecido por Tomás de Aquino es el diseño divino, o creacionismo,
el cual básicamente dice , “las cosas en el mundo, especialmente los seres vivos,
se ven como si hubieran sido diseñadas. Nada de lo que conocemos se ve diseñado
a menos de que haya sido diseñado. Por lo tanto, debió de existir un diseñador,
a quien llamamos Dios”. Este argumento, por más ilógico que parezca, sigue
siendo usado por muchas religiones en la actualidad. El mismo Darwin llegó a
creer en este argumento cuando era joven, pero posteriormente lo destruyó al
crear la teoría de la selección natural. De acuerdo a esta teoría, existen
seres vivos tan complejos que pareciera que fueron diseñados por un ser
superior, cuando en realidad son puras coincidencias de la naturaleza a través
de un gigantesco lapso de tiempo. Es una verdadera lástima que una teoría tan elegante
y acertada como la selección natural no pueda convivir con ideas religiosas,
gracias a que el pensamiento religioso impide que se vea al mundo como lo que
en realidad es.
Otra
forma de “comprobar” la existencia de Dios
es mediante experiencia personal. Mucha gente cree en Dios por que creen haber
tenido una especie de visión o aparición de un ser divino. Esta “evidencia” tampoco debería ser válida. Así cómo hay
gente que llega a presenciar a Dios dentro de su cabeza, también hay gente en
manicomios que creen ver un elefante rosa, que de ninguna forma justifica su
existencia. La única diferencia es que la gente que tiene alucinaciones de Dios
se les puede etiquetar como religiosos, de otra forma se les considera como
psicóticos. Los avances en la neurociencia nos han permitido conocer que esto
es un fenómeno muy común en el cerebro de los seres humanos, ya que los ojos
muchas veces no pueden darnos la imagen completa de lo que en verdad está
sucediendo, por lo que el cerebro tiende a modificar las imágenes
constantemente, dando origen a lo que conocemos como una ilusión. Sin embargo,
la religión tiende a ignorar la grandeza del cerebro humano al usar a Dios como
explicación para todo. Incluso aunque la gente que presencia dichas
experiencias esté verdaderamente convencida de que en verdad vio a Dios, no es
razón suficiente como para que el resto de la gente base su vida alrededor de
dicho Dios, especialmente si se tiene en mente el increíble funcionamiento del
cerebro humano.
Como
conclusión, la religión puede ser muy contradictoria e irreal por que las
autoridades religiosas intentan explicar racionalmente algo que no puede ser
comprendido por la razón. No estoy negando la existencia de Dios, pero sí creo
que la probabilidad de que exista es tan baja que no debería utilizarse como
explicación a cualquier cosa que aún no entendemos, ni mucho menos debería
interponerse en el camino de la razón y la ciencia, como ha hecho incontables
veces a través de la historia. Esto ocasiona una visión distorsionada de la
realidad y limita el pensamiento humano en lugar de ayudarnos a apreciar al
universo como en verdad es.
Como dijo Douglas Adams, "Isn't it enough to see that a garden is beautiful without having to believe that there are fairies at the bottom if it too?"