La Escuela de atenas

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Escuela de Atenas por Rafael

domingo, 20 de septiembre de 2015

Intraducibilidad

Todos hemos presenciado, o por lo menos escuchado a alguien hablar al respecto a modo de anécdota, sobre los terribles resultados que Google Translate puede llegar a proporcionar. Esto no se debe a que Google no sea capaz de crear un buen software traductor, pues no hay que olvidar que Google emplea a cientos de los mejores programadores del mundo. La razón por la que Google Translate no parece ser capaz de atinarle a una, es porque cada idioma humano funciona de forma compleja y única, expresando ideas y pensamientos en una forma que difícilmente puede ser replicada en cualquier otro idioma. Una de mis grandes pasiones son los idiomas y escogí esté tema porque desde que empecé a aprender otros idiomas me ha intrigado como cada unos de ellos parece ser espacialmente bueno para comunicar cierto tipo de ideas.
Cuando en clase de filosofía vimos historicidad, sobre cómo no debemos de tratar de entender los pensamientos de filósofos que vivieron en contextos históricos distintos al nuestro desde un contexto contemporáneo, pensé que algo similar debe de pasar con el idioma. Pensé en que nuestra realidad existe en español y que cuando leemos las ideas de algún filósofo inevitablemente las concebimos en español, pues no sólo este es el idioma en el que las leímos, sino que este es el contexto en el que estamos acostumbrados a procesar los pensamientos. Sin embargo, no hay que olvidar que las ideas que Aristóteles expresó en griego antiguo siempre serán hasta cierto grado diferentes a las que sus traducciones nos aportan.
Hace más de un año empecé a estudiar japonés, un idioma que curiosamente no hace distinción en la conjugación verbal entre el presente y el futuro; a veces el tiempo verbal puede ser inferido por contexto pero en muchas otras ocasiones la distinción entre futuro y presente puede desaparecer casi por completo. Mi maestra, una mujer japonesa que hace ya muchos años se mudó a México, me comentó que esta distinción hace que por los japoneses sean mucho más propensos a ahorrar que los hablantes de idiomas como el español. Esto se debe a que en su idioma el futuro se siente como algo mucho más cercano a la realidad que en el español donde el futuro esta inevitablemente separado del presente. Puedo entonces imaginarme la cantidad de retos con los que se debe de enfrentar un traductor japonés para poder traducir las ideas de un filósofo occidental acerca del tiempo escritas en algún idioma europeo donde existe otro concepto del futuro y que aún así hagan el mismo sentido en japonés.
Este es únicamente un ejemplo que pude dar debido a conocimiento que ya tenía, pero estoy seguro que así como éste, existen miles de ejemplos sobre cómo las peculiaridades de cada idioma no permiten que las ideas de un filósofo puedan ser expresadas con exactitud en otro. O por lo menos los hablantes de un idioma no tienen la capacidad de ajustar por completo a su forma de pensar frente a conceptos a los que desde niños no fueron expuestos.
Otro ejemplo es la famosa frase de René Descartes: “Pienso, luego existo”. Ésta fue escrita originalmente en francés como “Je pense, donc je suis” para la cual algunas traducciones más literales o apropiadas serían “Pienso, por lo tanto existo” o “Pienso, por lo tanto soy”. Ninguna de éstas cambia radicalmente el sentido de la frase, pero aún así es imposible no ponerse a pensar sobre cómo cada una de éstas nos proporciona una idea ligeramente distinta sobre lo dicho por Descartes.

En lingüística se considera que no existe tal cosa como un texto completamente traducible o completamente intraducible, y probablemente muchos de los textos filosóficos a los que podemos acceder son una traducción bastante cercana a lo que el autor quiso decir. Sin embargo, así como la historicidad nos permite poner las ideas de un autor dentro de su contexto histórico, considero que también hay que tener el cuenta el contexto del idioma en el que una idea fue escrita.
Mariano Cepeda Betancourt

4 comentarios:

  1. Mariano, me gustó mucho tu ensayo ya que, hasta ahora, nunca había considerado al idioma como contexto, lo cual es muy importante, más si de lo que estamos hablando es de ideas y no hechos. También me gustó que hayas incluido una experiencia personal para desarrollar tus argumentos.
    Como mencionaste, el idioma no permite que las ideas de un filósofo puedan ser expresadas en otro con exactitud, sin embargo, las interpretaciones que hemos dado a varios pensadores, aunque no sea exactamente lo que éstos quisieron expresar, son válidas. A lo mejor, esa descontextualización a través de los idiomas es benéfica en el sentido de que, dependiendo de la cultura que va de la mano de cada idioma, hayan, por todo el mundo, distintas adaptaciones de los diferentes conceptos filosóficos, así como del legado de varios filósofos antiguos.

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  2. Me pareció muy interesante el ensayo, sobre todo la forma en la que está escrito. Me gustó cómo partes de problemas cotidianos como el traductor de google y experiencias personales para desarrollar tus ideas y finalmente las extrapolas a la filosofía en sí. Esto permite que el lector verdaderamente se identifique con el tema de la intraducibilidad y comprenda cómo a grande escala incluso puede llegar a afectar la forma en la que pensamos e interpretamos la realidad.
    El ejemplo de las distintas traducciones de la frase de Descartés me ayudó a comprender que mucha gente ignora la posibilidad de que cambia el significado de una idea al ser traducida a otro idioma porque los cambios que sufren son muy sutiles. Sin embargo, esos cambios existen y estoy de acuerdo en que al no tomarlos en cuenta incluso podría llegar a ser una forma de descontextualización, cosa que no debería suceder en la filosofía.

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  3. Me pareció muy interesante el ensayo, sobre todo la forma en la que está escrito. Me gustó cómo partes de problemas cotidianos como el traductor de google y experiencias personales para desarrollar tus ideas y finalmente las extrapolas a la filosofía en sí. Esto permite que el lector verdaderamente se identifique con el tema de la intraducibilidad y comprenda cómo a grande escala incluso puede llegar a afectar la forma en la que pensamos e interpretamos la realidad.
    El ejemplo de las distintas traducciones de la frase de Descartés me ayudó a comprender que mucha gente ignora la posibilidad de que cambia el significado de una idea al ser traducida a otro idioma porque los cambios que sufren son muy sutiles. Sin embargo, esos cambios existen y estoy de acuerdo en que al no tomarlos en cuenta incluso podría llegar a ser una forma de descontextualización, cosa que no debería suceder en la filosofía.

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  4. La historicidad plantea dar contextonanun acontecimiento y el contexto también es el lenguaje. Tu tema ha sido una temática que muchos filósofos han tratado a lo largo del s. XX principalmente. Felicidades por ver en un punto tan interesante el tema de tu ensayo. Si te interesa podemos hablar de varios filósofos que tienen varios artículos al respecto.
    Cali. 10

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