Diego Servitje
6°A CCH
Filosofía
La verdad
Muchas veces me cuestiono el por qué
ciertas cosas se llaman como se llaman o son como son, y si realmente en su
momento se llego a cuestionar la realidad y los nombres de esas cosas, dudo que
hace millones de años hubiera existido una lista en donde todo tuviera un
nombre establecido e inamovible, por lo tanto alguien se dedico a hacerlo, pero
por que hacerle caso tanto a él como a los que lo apoyaban, ¿Cómo sabemos que
lo que decían era realmente la verdad?, no lo sabemos y jamás lo haremos.
Creo yo que el hombre de cierta
forma depende tanto de la mentira como de la verdad pues visto desde un punto
de vista muy objetivo podrían ser ambas lo más elemental del ser humano ya que son
ellas las que nos van poniendo las pautas y los limites dentro de nuestras
vidas, pues con las mentiras somos como una pequeña planta que crece sin
control y en donde todo es permitido mientras que la verdad se comporta como la
realidad disfrazada de una tijera que nos da forma y nos adapta al llamado
mundo “real”.
Desde otra perspectiva más
subjetiva como seres humanos no es posible podemos pedir la verdad cuando
muchas veces no somos verdaderos con nosotros mismos y con los demás por temor
a ver lo que realmente somos. Si no tenemos verdad nunca tendremos confianza
entre nosotros porque nunca sabremos si lo que nos dicen es para lastimarnos o
para defendernos. Sin embargo es ahí donde te das cuenta que vivimos en mundo
en donde dependemos de los demás para poder ser felices pues son ellos los únicos
que nos pueden hacer notar lo que es la verdad.
Lo único que sí que es verdad es
que siendo muy exigentes jamás podremos conocer que está hecha la verdad ya que
siempre hemos vivido en una burbuja de mentiras en donde ni siquiera se podría estar
seguro de la misma ciencia ya que no conocemos como es que esta funciona. Podrían
existir un sinfín de mentiras que hoy consideramos verdades porque siempre
hemos sido ignorantes por más que sepamos lo que sepamos y que seamos quienes
seamos siempre seremos tan vulnerables como todos. El ser humano para mi es se podría
decir que esta hecho de cartón pues somos resistentes pero hasta cierto punto y
ese punto son las mentiras, las mentiras son tanto el bien como el mal pues nos
abren un centenar de puertas que ni siquiera la mitad de ellas estamos
dispuestos a cerrar.
Es cierto que la verdad es la
mejor opción pero no siempre ya que nunca
nos arriesgaríamos a perder, si nunca perdemos siempre seremos unos un
mentirosos.
Diego, me llaman mucho la atención tus cuestionamientos pues posiblemente tengas razón. Aun así, es importante saber que ni la verdad, ni la mentira son absolutas y por lo tanto no podemos insistir en vivir completamente en ellas, sino sólo confiar en lo que sabemos de nuestro pasado es verdad e intentar vivir, dentro de o que se pueda, en ésta pues como tú bien dices, es la mejor opción.
ResponderEliminarMe gusto mucho tu ensayo y estoy de acurdo, no podemos saber la verdad ya que la verdad como dice Maria Martinez Escobarno es absoluta, es mas hasta lo que dices tampoco se puede saber "Lo único que sí que es verdad es que siendo muy exigentes jamás podremos conocer que está hecha la verdad"
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