Diego Servitje
6°A CCH
Filosofía
19/11/12
El Destino
Cuando sucede algo repentino o inesperado
dentro de nuestras vidas nos preguntamos a que se debe o simplemente nos
dejamos llevar y no lo tomamos en cuenta.
Mucha gente podría decir que se
debe al destino, que estamos destinados a ello pues sería la manera más
sencilla de explicar ese tipo de fenómenos que nos agarran por sorpresa en los
momentos menos o más esperados del día. Yo soy de la idea de que el destino es
una creación del ser humano, de nuestro cerebro, específicamente del subconsciente.
El destino es una creación muy ingeniosa ya que nos permite visualizar una
realidad o simplemente un objeto que quizá nuestro consciente no tiene idea que
existe pero subconscientemente se crea un mundo diferente.
A lo que voy es que el destino muchas veces creo yo que es la manifestación
más clara de lo que sucede dentro de nuestra cabeza, pues dentro se lleva una constante
batalla entre el consciente y el subconsciente la cual generalmente gana el
primero, pues la mayoría de las veces los seres humanos recurrimos al cociente
y muchas otras ni siquiera a el segundo. Es como si viviéramos dos vidas
distintas en nuestra cabeza, pero intentando llevar a nuestra realidad una sola
se pierde la otra. Ya dentro de nuestra vida y después de esa batalla el destino
para mi serian pequeñas piezas y herramientas de la vida del subconsciente que
quedaron intactas dentro de nuestro consciente y que es en esos momentos inesperados cuando
se sincronizan con los elementos que vivimos día con día. Un ejemplo seria
cuando conocemos a alguien, dentro de la vida normal del consciente podría ser
que viéramos pasar a esa persona pero no habláramos con ella, pero dentro de el
subconsciente o del destino por cualquier circunstancia chocáramos con esa
persona.
Se podría decir que vivimos “nuestra” vida en un 99% y el otro 1% lo vivimos
dentro de nuestro destino, pero muchas veces el creer, nos lleva a crear y es ahí
donde los porcentajes se podrían invertir pues si creemos en el destino y en
que todo sucede por una razón, vemos el verdadero trasfondo de la vida y vivimos
lo que realmente queremos vivir y no solo lo que vemos.
En otras palabras se podría decir que el
destino es una forma alternativa de ver la vida quizá con un poco de miel y cerezas
encima bueno tal vez no siempre. Eso si depende de nosotros cada cuanto nos
pongamos de acuerdo con nuestro destino.
Diego, yo creo que a razón de que no puedes avanzar ni retroceder en el tiempo, lo que una vez se hace no puede ser cambiado. No creo que la mayoría de las cosas hayan estado predestinadas a ser como son desde un principio, pero si creo que si no hay existencias paralelas ni viajes en el tiempo las cosas solo pudieron, pueden y podrán pasar como pararon, pasan o vayan a pasar.
ResponderEliminarNo creo, en lo personal, que tal cosa como el destino exista, ya que eso consistiría en que todos nacimos con un propósito establecido. Yo voy mas por la idea de que cada quien al tomar desiciones libres e instantaneas va definiendo su futuro.
ResponderEliminarYo estoy de acuerdo con tu ensayo ya que si nos ponemos a pensar en todo lo que nos pasa siempre acaba siendo por una razon que tal ves no la ves en ese instante pero con forme pasa el tiempo t das cuenta que eso paso por tal razon
ResponderEliminaro estoy de acuerdo con tu ensayo ya que si nos ponemos a pensar en todo lo que nos pasa siempre acaba siendo por una razon que tal ves no la ves en ese instante pero con forme pasa el tiempo t das cuenta que eso paso por tal razon
ResponderEliminarDiego, me gusta mucho la manera en la que empiezas tu escrito, pues forzosamente lo ligas a que todos nos cuestionemos dentro de nosotros mismos. Por otro lado me parece muy interesante tu manera de de ver "el destino", incluso creo que hasta coincido contigo. Definitivamente es una manifestación de que nosotros mismos producimos y experimentamos, así como también una alternativa de vida.
ResponderEliminar¡Te felicito, me pareció excelente!