Eduardo Ochoa Canalizo 6°A CCH Filosofía II 16/II/13
Comentario I
En el texto que recién leímos, el autor comienza hablando de la libertad del hombre. Expone las dos principales posturas desde las que la filosofía la ha abordado a lo largo del tiempo: la primera, como aquello que distingue al hombre del resto de los animales, una intrínseca capacidad de elegir considerando las consecuencias; la segunda, como una palabra que designa el conjunto de acciones predeterminadas que el hombre igualmente por naturaleza propia. Es decir, que el hombre actúa a favor o en contra suya según la circunstancia. A continuación, hace uso de la antropología filosófica, aquella rama de la filosofía que estudia las explicaciones que el hombre ha dado para sí y para su entorno a lo largo de la historia, para intentar definir qué es. Advierte, antes que nada, que la ciencia ha confirmado cuestiones sobre el mismo que, por su veracidad, ya no son discutibles para la filosofía. Pero así mismo dice que es imposible definir al hombre completamente por la ciencia, pues ésta deja de lado toda su obra, el arte, que la filosofía estudia para lograrse una idea de cómo eran los hombres que la crearon. En fin, según él es imposible definir a un hombre desde un solo campo, pues está lleno de particularidades y excepciones. Pero al mismo tiempo hace alarde de la eficacia de la filosofía, aquella disciplina orientada a lo universal, para lograr una visión más objetiva del mismo. Afirma que es en la filosofía donde puede definirse al hombre desde su trascendencia, donde puede confluir una síntesis sobre el mismo que provenga tanto de la ciencia como de la religión, el pensamiento, aquello que nos hace especular sobre nuestra razón de existir en ésta tierra. No obstante, dentro de ésta tarea la pregunta vertical no es qué es el hombre, sino qué es lo que lo hace hombre. Y yo concuerdo con el autor cuando afirma que es algo muy difícil de descubrir pues se trata de una idea que ha variado dependiendo la época y espacio en los que la humanidad se ha desempeñado. Por eso concluye que lo que hace hombre al hombre es su esencia, algo que según yo es imposible de definir con palabras por que abarca tanto que nuestro léxico se agotaría antes de nombrarlo y sintetizarlo todo. Creo también que el intento debe de hacerse a través de la filosofía, pues la ciencia lo hace desde un punto de vista externo, objetivo, imparcial y ajeno. En cambio la filosofía es ante todo introspectiva, del hombre para sí mismo. Podría decir que el hombre es aquel que recuerda, pero no aplicaría para aquel sin memoria. Podría decir entonces que el hombre es aquel que es libre de elegir su propio camino, pues es capaz de racionar a futuro. Pero son tantas las presiones que tenemos y tantas cosas las que influyen sobre nosotros que a veces nos es imposible elegir lo que queremos. Al final no fuimos nosotros los que elegimos ser hombres. Algo más acertado y universal, como dice serlo la filosofía, sería afirmar que el hombre es aquel que nace de su unión con una mujer, pero deja de lado tantas cosas de lo que es su esencia, una esencia que no conocemos, que no podemos explicar ni describir con palabras pero que sentimos, sabemos lo que es a pesar de todo y la reconocemos en cada momento, como San Agustín lo hacía con el tiempo aun así no supiera decir lo que es. P.D.: No es que piense que entonces no sirve de nada filosofar sobre lo anterior, pues a pesar de que la respuesta cambiará constantemente, su búsqueda nos proporciona grandes conocimientos sobre nosotros mismos que colaboran a juzgarnos sino mejor, más ampliamente.
Lalo, la mayor parte de lo que escribiste lo leímos todos en la lectura. Siendo tuyo este comentario hubiera esperado otra cosa, siento que dijiste mucho sobre el autor y lo que él piensa, me hubiera gustado ver un poco más acerca de tu opinión en tan largo comentario ya que no me quedo muy claro que piensas al respecto de esto, ¿qué es el hombre?
Concuerdo contigo en que esta interrogante nos proporciona muchos conocimientos sobre nosotros mismos, y que nos es imposible siquiera pensar en una definición de esa "esencia". Desde un punto de vista religioso, esta esencia se refiere al alma.
Refiere también el autor que es precisamente la búsqueda de todas las particularidades de todos los aspectos del hombre para poder definirlo en su totalidad, la que lo aleja de su esencia. Es aquí donde yo encuentro una contradicción en sus palabras, pues, si son las particularidades lo que distraen de la totalidad, entonces es más eficaz acercarse a ella desde la parcialidad, desde la generalidad. La lógica diría entonces por silogismo que es imposible llegar a esa totalidad, pues el primer camino, el de todos los detalles que supuestamente la alcanza después de enumerarlos, sólo entorpece el paso hasta ella, mientras que el segundo, el de lo universal, el de las mayorías, nunca la alcanza aunque posiblemente la rose, como una tangente. Menciona que sólo si se toma en cuenta como consigna al Hilo de Adriana, aquel que todo lo liga y todo lo relaciona, sería posible tocarla siguiendo el primer camino. Pero la mente humana, su herramienta para dar nombre a todo, es mucho, pero mucho más reducida que esa posible unidad, por lo que siempre dejará de tomar en cuenta aquello que por omisión le imposibilite para siempre contemplarla.
Y es debido a esa pequeñez de la comprensión humana que no podemos definir ni nombrar ni contemplar nuestra esencia. Es por esa limitación, por esa imposibilidad natural de abarcarlo todo que la filosofía cambia sus respuestas a cada rato, con cada cosa que olvida y cada cosa que encuentra. Si nuestra mente fuera lo suficientemente grande como para lograr vislumbrar la unidad de todo, entonces nuestras vidas serían perfectas porque también tendríamos la capacidad para considerar todo aquello que nos podría afectar en el futuro: no tendríamos errores, no seríamos humanos. Pero… ¡he aquí una posible respuesta a lo que somos!: somos seres incapaces de contemplar el todo. Pero los animales también lo son, no es limitación exclusiva del hombre, por lo tanto no define su esencia. Y es justamente es éste momento que iba a poner: “el hombre por lo tanto no puede ser definido ni por la ciencia ni por la filosofía, porque, a pesar de ser la primera perfecta, tiene que considerar a la segunda para ser completa, por lo tanto el hombre no debe de ocuparlas en esta tarea, pues la esencia es algo que se siente…”, mas se me ocurrió una respuesta: el hombre es aquel ser que se pregunta. Los animales no se cuestionan, lo hacen todo mecánicamente. Si se cuestionaran, en tantos miles de años que han vivido en la Tierra habrían convertido sus manadas, parvadas y jaurías en sociedades, en comunidades progresivas que analizan sus errores para hacer mejor las cosas. Pero, ¿y aquel hombre que por desgracia tiene parálisis cerebral y no se puede preguntar? ¿A caso no es hombre? ¿Siente, pero no lo puede saber porque no tiene una mente que se lo pueda indicar? La misma pregunta me ha llevado a divagar en detalles que sólo me alejan de mi cuestión inicial, prueba de la contradicción que mencioné sobre el autor en éste texto y de la incapacidad de la mente y por lo tanto de la filosofía para alcanzar el todo. Sigo, entre tanto, buscando el Hilo de Adriana que será responsable del fin de la filosofía y del hombre cuando alguien lo encuentre, pues entonces no habrá nada nuevo que descubrir y los hombres seremos Dioses.
Me parece muy interesante tu pregunta acerca del hombre con parálisis cerebral, coincido contigo al decir que regresas a la pregunta inicial, si estamos diciendo que el hombre es un ser racional que puede pensar y hablar, ¿cómo éste sería hombre? Podríamos cambiar la pregunta inicial ¿qué es el hombre? Por ¿ser humano o hombre, cual es la diferencia? Considero que el ser humano seria el de parálisis y un hombre seria un ser racional, pero ¿quién soy yo para decirlo? Esta es nada más mi humilde opinión .
¿Qué es el hombre? creo que no hay una definición o respuesta a esta pregunta, pienso que somos muy diferentes como para definirnos en una idea, creo que todas las respuestas son correctas, todos tenemos nuestra propia definición y todos lo vemos desde puntos diferentes. Un hombre es un ser racional, un ser capaz de pensar, hablar, comunicarse y entender. Un hombre es un ser perteneciente a una comunidad, la cual interfiere en el hombre; su personalidad, sus creencias, su cultura, su educación, etc. Todo ser humano tiene la necesidad y la curiosidad por conocerse, por lo que considero que gracias a nuestra capacidad racional, podemos encontrar gran diversidad de respuestas. En mi opinión, todo lo que hacemos, decimos y tenemos es lo que nos define a cada uno como hombres.
Como ya dije en mi comentario, creo que el fin de una definición es generalizar. Si consideramos todos los aspectos culturales, físicos y psicológicos de una persona y tratamos de definirla, no tendríamos la definición de "hombre", sino la definición de solo esa persona en particular.
Ernesto creo que al decir que no podemos generalizar al dar una definicion del hombre, y que por lo tanto esta mal; estas generalizando de la misma manera ya que creo que aunque no conocemos ninguna definicion del hombre que pueda ser satisfactoria, no quiere decir que no exista la posibilidad de que la haya, por lo tanto yo creo que esta bien definirlo, es un paso mas al entendernos
Aristóteles define al hombre como un animal racional. Entonces alguien llega y le dice: ¿Quieres decir que una persona en estado de coma, no es hombre? Otro ejemplo parecido: El perro es una animal doméstico que se caracteriza por su fidelidad al hombre. ¿Entonces un perro que es callejero, no es perro? ¿Un perro que no le es fiel a su amo, no es perro? Siguiendo esta lógica cada hombre, cada animal, cada objeto tendría una definición propia. Este argumento me parece totalmente inválido porque el fin de una definición es generalizar. El problema de definir qué es el hombre radica en otro punto. Hasta ahora ha sido imposible sintetizar todos los aspectos o enfoques del hombre en una sola oración. Los biólogos tienen una definición, los psicólogos otra, los historiadores otra, etc. A menos que todas la ciencias y disciplinas se integren en una sola, creo que esta interrogante estará presente hasta el fin de la humanidad. Quizá otra especie pueda algún día decirnos qué es el hombre.
Aristoteles define al hombre como un animal racional, esto me parece completamente erroneo, me parece que no podemos definir al hombre ya que este es un ser demasiado complejo con demasiadas variedades y particularidades para poderlo definir con solo un concepto; por que si asi fuera si esto fuera posible entonces todos seriamos seres tan simples que no podriamos definirlo nosotros mismos. El hombre es ahora un ser multidiciplinario y cada disciplina tiene su definicion de que es el hombre, creo que no es cuestion de quedarnos con la interrogante de que es el hombre hasta el fin de los tiempos sino que tomemos un poco de cada definicion
Buen equipo. Ha funcionado el diálogo, sin embargo me hubiera gustado que se contestaran en los comentarios de los comentarios. Lalo, sé que es difícil comentar (o imposible) hacerlo si no hay comentarios por eso les pido a todos que no esperen hasta el final.
Eduardo Ochoa Canalizo
ResponderEliminar6°A CCH
Filosofía II
16/II/13
Comentario I
En el texto que recién leímos, el autor comienza hablando de la libertad del hombre. Expone las dos principales posturas desde las que la filosofía la ha abordado a lo largo del tiempo: la primera, como aquello que distingue al hombre del resto de los animales, una intrínseca capacidad de elegir considerando las consecuencias; la segunda, como una palabra que designa el conjunto de acciones predeterminadas que el hombre igualmente por naturaleza propia. Es decir, que el hombre actúa a favor o en contra suya según la circunstancia.
A continuación, hace uso de la antropología filosófica, aquella rama de la filosofía que estudia las explicaciones que el hombre ha dado para sí y para su entorno a lo largo de la historia, para intentar definir qué es. Advierte, antes que nada, que la ciencia ha confirmado cuestiones sobre el mismo que, por su veracidad, ya no son discutibles para la filosofía. Pero así mismo dice que es imposible definir al hombre completamente por la ciencia, pues ésta deja de lado toda su obra, el arte, que la filosofía estudia para lograrse una idea de cómo eran los hombres que la crearon. En fin, según él es imposible definir a un hombre desde un solo campo, pues está lleno de particularidades y excepciones. Pero al mismo tiempo hace alarde de la eficacia de la filosofía, aquella disciplina orientada a lo universal, para lograr una visión más objetiva del mismo. Afirma que es en la filosofía donde puede definirse al hombre desde su trascendencia, donde puede confluir una síntesis sobre el mismo que provenga tanto de la ciencia como de la religión, el pensamiento, aquello que nos hace especular sobre nuestra razón de existir en ésta tierra.
No obstante, dentro de ésta tarea la pregunta vertical no es qué es el hombre, sino qué es lo que lo hace hombre. Y yo concuerdo con el autor cuando afirma que es algo muy difícil de descubrir pues se trata de una idea que ha variado dependiendo la época y espacio en los que la humanidad se ha desempeñado. Por eso concluye que lo que hace hombre al hombre es su esencia, algo que según yo es imposible de definir con palabras por que abarca tanto que nuestro léxico se agotaría antes de nombrarlo y sintetizarlo todo. Creo también que el intento debe de hacerse a través de la filosofía, pues la ciencia lo hace desde un punto de vista externo, objetivo, imparcial y ajeno. En cambio la filosofía es ante todo introspectiva, del hombre para sí mismo. Podría decir que el hombre es aquel que recuerda, pero no aplicaría para aquel sin memoria. Podría decir entonces que el hombre es aquel que es libre de elegir su propio camino, pues es capaz de racionar a futuro. Pero son tantas las presiones que tenemos y tantas cosas las que influyen sobre nosotros que a veces nos es imposible elegir lo que queremos. Al final no fuimos nosotros los que elegimos ser hombres. Algo más acertado y universal, como dice serlo la filosofía, sería afirmar que el hombre es aquel que nace de su unión con una mujer, pero deja de lado tantas cosas de lo que es su esencia, una esencia que no conocemos, que no podemos explicar ni describir con palabras pero que sentimos, sabemos lo que es a pesar de todo y la reconocemos en cada momento, como San Agustín lo hacía con el tiempo aun así no supiera decir lo que es.
P.D.: No es que piense que entonces no sirve de nada filosofar sobre lo anterior, pues a pesar de que la respuesta cambiará constantemente, su búsqueda nos proporciona grandes conocimientos sobre nosotros mismos que colaboran a juzgarnos sino mejor, más ampliamente.
Lalo, la mayor parte de lo que escribiste lo leímos todos en la lectura. Siendo tuyo este comentario hubiera esperado otra cosa, siento que dijiste mucho sobre el autor y lo que él piensa, me hubiera gustado ver un poco más acerca de tu opinión en tan largo comentario ya que no me quedo muy claro que piensas al respecto de esto, ¿qué es el hombre?
EliminarConcuerdo contigo en que esta interrogante nos proporciona muchos conocimientos sobre nosotros mismos, y que nos es imposible siquiera pensar en una definición de esa "esencia". Desde un punto de vista religioso, esta esencia se refiere al alma.
EliminarComentario II
ResponderEliminarRefiere también el autor que es precisamente la búsqueda de todas las particularidades de todos los aspectos del hombre para poder definirlo en su totalidad, la que lo aleja de su esencia. Es aquí donde yo encuentro una contradicción en sus palabras, pues, si son las particularidades lo que distraen de la totalidad, entonces es más eficaz acercarse a ella desde la parcialidad, desde la generalidad. La lógica diría entonces por silogismo que es imposible llegar a esa totalidad, pues el primer camino, el de todos los detalles que supuestamente la alcanza después de enumerarlos, sólo entorpece el paso hasta ella, mientras que el segundo, el de lo universal, el de las mayorías, nunca la alcanza aunque posiblemente la rose, como una tangente.
Menciona que sólo si se toma en cuenta como consigna al Hilo de Adriana, aquel que todo lo liga y todo lo relaciona, sería posible tocarla siguiendo el primer camino. Pero la mente humana, su herramienta para dar nombre a todo, es mucho, pero mucho más reducida que esa posible unidad, por lo que siempre dejará de tomar en cuenta aquello que por omisión le imposibilite para siempre contemplarla.
Comentario III
EliminarY es debido a esa pequeñez de la comprensión humana que no podemos definir ni nombrar ni contemplar nuestra esencia. Es por esa limitación, por esa imposibilidad natural de abarcarlo todo que la filosofía cambia sus respuestas a cada rato, con cada cosa que olvida y cada cosa que encuentra. Si nuestra mente fuera lo suficientemente grande como para lograr vislumbrar la unidad de todo, entonces nuestras vidas serían perfectas porque también tendríamos la capacidad para considerar todo aquello que nos podría afectar en el futuro: no tendríamos errores, no seríamos humanos. Pero… ¡he aquí una posible respuesta a lo que somos!: somos seres incapaces de contemplar el todo. Pero los animales también lo son, no es limitación exclusiva del hombre, por lo tanto no define su esencia.
Y es justamente es éste momento que iba a poner: “el hombre por lo tanto no puede ser definido ni por la ciencia ni por la filosofía, porque, a pesar de ser la primera perfecta, tiene que considerar a la segunda para ser completa, por lo tanto el hombre no debe de ocuparlas en esta tarea, pues la esencia es algo que se siente…”, mas se me ocurrió una respuesta: el hombre es aquel ser que se pregunta. Los animales no se cuestionan, lo hacen todo mecánicamente. Si se cuestionaran, en tantos miles de años que han vivido en la Tierra habrían convertido sus manadas, parvadas y jaurías en sociedades, en comunidades progresivas que analizan sus errores para hacer mejor las cosas. Pero, ¿y aquel hombre que por desgracia tiene parálisis cerebral y no se puede preguntar? ¿A caso no es hombre? ¿Siente, pero no lo puede saber porque no tiene una mente que se lo pueda indicar? La misma pregunta me ha llevado a divagar en detalles que sólo me alejan de mi cuestión inicial, prueba de la contradicción que mencioné sobre el autor en éste texto y de la incapacidad de la mente y por lo tanto de la filosofía para alcanzar el todo. Sigo, entre tanto, buscando el Hilo de Adriana que será responsable del fin de la filosofía y del hombre cuando alguien lo encuentre, pues entonces no habrá nada nuevo que descubrir y los hombres seremos Dioses.
Me parece muy interesante tu pregunta acerca del hombre con parálisis cerebral, coincido contigo al decir que regresas a la pregunta inicial, si estamos diciendo que el hombre es un ser racional que puede pensar y hablar, ¿cómo éste sería hombre? Podríamos cambiar la pregunta inicial ¿qué es el hombre? Por ¿ser humano o hombre, cual es la diferencia?
EliminarConsidero que el ser humano seria el de parálisis y un hombre seria un ser racional, pero ¿quién soy yo para decirlo? Esta es nada más mi humilde opinión .
Me parece muuy interesante lo que planteas acerca de el hombre, creo que mas que definirlo; deberiamos entenderlo
EliminarMiguel: desarrolla más tus comentarios para que entedamos lo que quieres decir de mejor manera.
Eliminar¿Qué es el hombre? creo que no hay una definición o respuesta a esta pregunta, pienso que somos muy diferentes como para definirnos en una idea, creo que todas las respuestas son correctas, todos tenemos nuestra propia definición y todos lo vemos desde puntos diferentes.
ResponderEliminarUn hombre es un ser racional, un ser capaz de pensar, hablar, comunicarse y entender. Un hombre es un ser perteneciente a una comunidad, la cual interfiere en el hombre; su personalidad, sus creencias, su cultura, su educación, etc.
Todo ser humano tiene la necesidad y la curiosidad por conocerse, por lo que considero que gracias a nuestra capacidad racional, podemos encontrar gran diversidad de respuestas.
En mi opinión, todo lo que hacemos, decimos y tenemos es lo que nos define a cada uno como hombres.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
EliminarComo ya dije en mi comentario, creo que el fin de una definición es generalizar. Si consideramos todos los aspectos culturales, físicos y psicológicos de una persona y tratamos de definirla, no tendríamos la definición de "hombre", sino la definición de solo esa persona en particular.
EliminarErnesto creo que al decir que no podemos generalizar al dar una definicion del hombre, y que por lo tanto esta mal; estas generalizando de la misma manera ya que creo que aunque no conocemos ninguna definicion del hombre que pueda ser satisfactoria, no quiere decir que no exista la posibilidad de que la haya, por lo tanto yo creo que esta bien definirlo, es un paso mas al entendernos
EliminarEse problema se resuelve cuando seguimos el camino que les he planteado en la clase, no definición, sí descripción.
EliminarAristóteles define al hombre como un animal racional. Entonces alguien llega y le dice: ¿Quieres decir que una persona en estado de coma, no es hombre?
ResponderEliminarOtro ejemplo parecido: El perro es una animal doméstico que se caracteriza por su fidelidad al hombre. ¿Entonces un perro que es callejero, no es perro? ¿Un perro que no le es fiel a su amo, no es perro? Siguiendo esta lógica cada hombre, cada animal, cada objeto tendría una definición propia. Este argumento me parece totalmente inválido porque el fin de una definición es generalizar.
El problema de definir qué es el hombre radica en otro punto. Hasta ahora ha sido imposible sintetizar todos los aspectos o enfoques del hombre en una sola oración. Los biólogos tienen una definición, los psicólogos otra, los historiadores otra, etc. A menos que todas la ciencias y disciplinas se integren en una sola, creo que esta interrogante estará presente hasta el fin de la humanidad.
Quizá otra especie pueda algún día decirnos qué es el hombre.
La generalización limita nuestro conocimiento, pero a veces la necesitamos para orientarnos.
EliminarAristoteles define al hombre como un animal racional, esto me parece completamente erroneo, me parece que no podemos definir al hombre ya que este es un ser demasiado complejo con demasiadas variedades y particularidades para poderlo definir con solo un concepto; por que si asi fuera si esto fuera posible entonces todos seriamos seres tan simples que no podriamos definirlo nosotros mismos.
ResponderEliminarEl hombre es ahora un ser multidiciplinario y cada disciplina tiene su definicion de que es el hombre, creo que no es cuestion de quedarnos con la interrogante de que es el hombre hasta el fin de los tiempos sino que tomemos un poco de cada definicion
Buen equipo. Ha funcionado el diálogo, sin embargo me hubiera gustado que se contestaran en los comentarios de los comentarios. Lalo, sé que es difícil comentar (o imposible) hacerlo si no hay comentarios por eso les pido a todos que no esperen hasta el final.
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