Paulina Bitar Prado
6ºA
Filosofía
La filosofía desde mi perspectiva
En algún punto
de la vida todo ser humano se topa con una encrucijada entre el querer saber y
el miedo a saber; varios deciden irse por el querer saber, pero lo que en
realidad no ven es que al final del túnel, los caminos se intersectan, llegando
a un estado de incertidumbre. Esta incertidumbre es el cuestionamiento infinito
del porque de las cosas, yendo más allá de las ansias del saber—se ha
convertido en una desconfianza hacia el mundo y hacia uno mismo. Es aquí cuando la filosofía toma lugar en la
vida de alguien.
La filosofía por definición propia
es la disciplina que cuestiona los sucesos del mundo, día a día, en su estado
natural. En otras palabras filosofar es perder la certeza de lo que sabemos con
el afán de saber mas, volviéndose un circulo vicioso ya que al llegar al fondo
del mar, resulta que aun hay más distancia que bucear. El problema de la
filosofía radica en que no existe una respuesta concreta a las preguntas con
las que uno tropieza, ya que al intentar contestar una cuestión una nueva pregunta
surge, y así sucesivamente, creando un ambiente inseguro y dudoso, ¿a qué me
refiero con esto? ¿a violencias ó asaltos? No, por el contrario, me refiero a
un estado pacifico pero donde la mente del hombre se encuentra en constante
crisis por intentar buscar nuevos conocimientos y abrir camino a nuevas rutas
por explorar. Y todo esto recalca los principales objetivos de la filosofía al
originarse.
Los propósitos de esta disciplina
son tres: el primero, dado por Aristóteles es la admiración intelectual, en
otras palabras, ser el inteligente para poder ser parte de todo. San Agustín
puso como segundo objetivo que “los filósofos, en su vida buscan la felicidad.”
Y para completar, la tercera razón según Francis Bacon es el satisfacer las
necesidades humanas.
Claro esta que todo en la filosofía gira
entrono al mismo punto, que es hacer uso de la razón para poder llegar a ser
personas integras, decididas, y con opinión propia. Ahora es momento de que
pongamos nuestra mente en marcha, busquemos nuevas descripciones para la
palabra filosofía, y volvamos a la etapa de la niñez donde todo lo queremos
saber, donde el miedo no ha tocado nuestro ser. No hay que dejar pasar ningún
instante mas, hay que comenzar a hacer uso de la razón, a levantarnos en contra
de las pautas marcadas por la sociedad, a lograr que por medio del pensamiento
los horizontes se expandan, y así dar testimonio de que la filosofía puede que
no enseñe algo concreto, pero eso si, nos enseña a buscar dentro de nosotros
para así poner en contacto nuestro aprendizaje interno con el mundo exterior.
Excelente ensayo. Escribes con mucha claridad y de forma ordenada. Los recursos que utilizas como las metáforas nos permiten entender de mejor manera lo que quieres decir.
ResponderEliminarPuede ser que tengas razón al hablar de la filosofía como un estado de crisis interna; muchos filósofos hablan de la soledad como un estado necesario para su labor. Solamente sabiendo y no perdiendo de vista que vivimos en uan sociedad, es cuando la filosofía será llevada a la calle. Muy buena reflexión.
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